Constantin Virgil Gheorghiu fue un escritor rumano que en 1944 se exilió voluntariamente cuando las tropas rusas entraron en Rumania. Al final de la Segunda Guerra Mundial fue arrestado por las tropas estadounidenses y recluido en un campo de concentración durante dos años. En 1948 se estableció en Francia donde murió en su capital.
Constantin Virgil Gheorghiu (1916-1992)
Su obra más famosa es La hora 25 novela escrita en rumano pero publicada por primera vez, en 1949, en una traducción francesa. Es una obra trágica y filosófica, con un componente autobiográfico, que escribió durante el tiempo que estuvo prisionero. En ella se describen los sufrimientos de un humilde campesino, Iohann Moritz, símbolo del ser humano inocente que es aplastado por el poder despiadado e inclemente.
La hora 25 nos muestra el retrato y testimonio de una época: la de los años 40 del siglo XX, con una visión trágica de la historia en la que el auge de las ideologías nazi, comunista y liberal-capitalista,-aunque el autor no las nombre así pero se sobreentienden,- unido al avance de la mecanización en la sociedad occidental llevan a la humanidad a una hora 25, un punto sin retorno, en la que se ha perdido toda esperanza de salvación.
En esta novela no encontramos una visión dual de la Segunda Guerra Mundial en la que se nos muestre la bondad o maldad de un bando o de otro, sino que en La hora 25 se menciona la brutalidad de los campos de concentración, la deportación de los judíos, el imperialismo belicista alemán, así como la violencia del ejército ruso sobre todo con las mujeres; y la ceguera de los vencedores, que declaran culpable a la población de países enteros y actúan con ella con la misma inhumanidad de los vencidos.
Henri Verneuil (1920-2002)
En 1967 el director francés de origen armenio Henri Verneuil dirige una película franco-italo-yugoslava basada en esta novela y titulada también La hora 25 e interpretada por Anthony Quinn y Virna Lisi.
Tráiler de la película
Como en todas las adaptaciones cinematográficas de una novela el guión de la película modifica o silencia algunos pasajes de la obra y se inventa otros; pero La hora 25 es una magnífica película que hay que ver, así como la novela debe ser leída a pesar de narrar una época histórica pasada, de un trágico recuerdo, hay en ella una advertencia contra la deshumanización de una sociedad burocratizada y tecnificada, algo que se puede aplicar en los tiempos actuales.
En resumen La hora 25 es la defensa apasionada de la libertad, de la dignidad del ser humano frente a la opresión.
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