viernes, 30 de agosto de 2013

Soledades


          Ya lo dijo Lope de Vega en un poema:

    A mis soledades voy,
de mis soledades vengo,
porque para andar conmigo
me bastan mis pensamientos.
 
                      

miércoles, 28 de agosto de 2013

Tambores de guerra

          La expresión "tambores de guerra" refiriéndose al conflicto sirio está apareciendo en los medios de comunicación. ¡Qué pasa! ¿Es que se trata de una película de Hollywood en la que los buenos de la caballería USA cargan contra los belicosos y malos indios que cortan cabelleras?.

          Un poco de seriedad, que no es ficción: la muerte es real y la sangre derramada también y no salsa de tomate.

 

martes, 27 de agosto de 2013

Viaje a NordKapp o Cabo Norte

          Si Ushuaia en isla Grande, allá en tierras argentinas, es la ciudad más austral del mundo antes de la inhóspita Antártida, corresponde al Cabo Norte, en la noruega isla de Mageroya, ser el punto más septentrional de Europa a tan solo unos mil kilómetros de distancia del Polo Norte.
 
 
 
          Mageroya es una isla desarbolada y casi deshabitada, donde la tundra y los suelos pedregosos cubren su superficie y, a la que siempre se accedía por mar, pero desde el año 1999 quedó unida al resto del continente por un túnel construido a 212 metros bajo el nivel del mar y con una longitud de 6.8 Km. El túnel tiene a ambos lados unos aparcamientos que los habitantes de la isla utilizan, durante el duro invierno, para guardar sus coches.
 


 
 
         
 
 
           La pequeña localidad de Honningsvag es la capital de la isla. Su puerto es el cuarto de Noruega en número de cruceros que atracan.
 
 
 
 
 
 


 
 
          Pero la mayor atracción de Mageroya es el Nordkapp o Cabo Norte. Una carretera estrecha y sepenteante nos conduce,-por un paisaje de pequeñas montañas de cimas redondeadas y desprovistas de árboles-, hasta la roca del Cabo Norte.
 
 
 
          La tundra se extiende con su uniforme manto sobre la superficie terrestre y un halo de silencio y desolación nos envuelve durante el recorrido. Unos solitarios renos nos muestran la vida y, a lo lejos, unas pinceladas blancas sobre el monótono marrón del campo se debaten entre permanecer algún tiempo más como hielo o transformarse en incoloro líquido que beberá la insaciable tierra.
 
 
                                       
                               
 
 
          Cada año llegan al Cabo Norte miles de personas dispuestas a pisar no solo el lugar más al norte del continente europeo sino a disfrutar, sobre todo, con la contemplación del sol de medianoche, que abarca desde el 10 de mayo hasta el 30 de julio, en el que el día dura veinticuatro horas. No hay noche, todo es claridad.
 
          Durante estos dias el disco solar resplandece con su luminosidad cegadora sobre el horizonte y cuando parece que, por fin, se va a ocultar lanza un destello reluciente y vuelve a elevarse y brillar aún más. Es uno de los fenómenos más hermosos de cuantos se pueden contemplar en nuestro planeta.
 
 

 
 
          Y allí en los confines de Europa, pisando el Cabo Norte y con la mirada perdida al frente contemplando las frías aguas que conducen inexorablemente al final de la Tierra recordé las palabras de Francesco Negri, -el italiano que en el verano de 1664 fue el primero en llegar caminando hasta este lugar, con la ayuda de una mula-, y al contemplar la plácida belleza del entorno dijo: "Ahora estoy en el Cabo Norte, en la misma esquina del mundo. Aquí termina el mundo y mi curiosidad."
 
 
 
   
 
 
 
 

sábado, 24 de agosto de 2013

En un hilo y en pendiente



           Estos pájaros pueden abandonar esa situación real cuando quieran. Tienen alas.
 
           Nosotros, los humanos, estamos en una posición parecida: haciendo equilibrios para no caer y, subiendo por la cuerda floja que nos han tendido para aniquilarnos los del Club Bildeberg y los Rothschild, Morgan, Rockefeller y las otras pocas familias que gobiernan el mundo.

martes, 20 de agosto de 2013

Ni,ni,ni...

          Ni el más guapo, ni el más listo, ni el más bueno, ni...
 


          Porque siempre habrá uno más bello, otro más inteligente o más bondadoso, y alguien más... que tú.
 
 
 

domingo, 18 de agosto de 2013

Viaje a Petra

 
 
 
          Petra es el lugar más extraordinario que se puede visitar en Jordania y su visión ya justifica el viaje.
          Fue una de las ciudades perdidas que durante cientos de años permaneció oculta al mundo. Solo se sabía de ella por los escritos de autores griegos y romanos; la última noticia de la ciudad se encuentra en las memorias de un peregrino en 1217.
 
         
          Estrecho, alto y largo desfiladero, denominado Siq, por donde se accede a Petra.
 
 
          El suizo Johann Ludwig Burckhardt descubrió Petra, en 1812  por casualidad, durante un viaje muy arriesgado desde Siria a El Cairo después de haber superado el desfiladero excavado por un río entre imponentes paredes de arenisca.
 


 
          Después de haber recorrido a pie el impresionante desfiladero aparece el magnífico edificio Khasnè o del Tesoro.
 

 

 
  
                         
 
 
          Las construcciones de Petra están excavadas en la roca, que al tener un colorido variado presentan un fascinante aspecto.

 
 
           Luego de varias horas visitando las tumbas, el teatro, la vía columnada, el templo de los Leones Alados,... solo queda la parte más difícil: la subida al edificio de El Deir , una ascensión de casi una hora por una escarpada senda. Hay quienes no quieren hacer tal esfuerzo y alquilan a los beduinos los servicios de un burro-taxi, aunque algunos de los pasajeros se arrepientan después, ya que la subida a lomos de estos animales les hacen experimentar momentos de pánico en cada ascensión pues parecen que se vayan a resbalar con las piedras y caer rodando turistas y burros.
 
 
 

                                
  
                   Pero el sacrificio y ahogo del ascenso tienen la recompensa del bello lugar.

 
 
 




 
 
 
 
 
 
 


viernes, 16 de agosto de 2013

Patata

 

              A la patata le salieron grillos que crecían, crecían, crecían... amenazando con sus tentáculos devorarla.
              Su piel se fue arrugando cada día y reduciéndose hasta que se convirtió en una patata pequeña y podrida...

jueves, 15 de agosto de 2013

La corriente

 
 
          Desde la orilla del río en la que  se encontraba observó que la corriente era hacia la izquierda pero, pensó, que si estuviera en la orilla de enfrente entonces la dirección sería hacia la derecha. Todo dependía del lugar donde se hallara, aunque inexorablemente las aguas siempre irán hacia abajo, hacia el mar... Ellas no pueden cambiar su curso, ni las cosas que por azar viajan en ella pueden escapar a esa corriente que todo lo arrastra aguas abajo.
 
 
 


          Yo no soy una cosa,-dijo para sí-, soy una persona y puedo intentarlo. Iré en contra de la corriente, nadaré aguas arriba, hacia las montañas. No lo pensó más, se lanzó al río y nadó...Conseguiría vencer a la corriente; lo había deseado siempre. Allí, así permaneció largo rato, varias horas, luchando contra ella, dominándola, doblegándola, venciéndola.
 
 


          Pasaron varios días y algunos kilómetros más abajo unos agricultores sacaron del río a un hombre que flotaba en sus aguas, y al depositar sobre la tierra aquel cuerpo hinchado vieron en el rostro, cerúleo y macilento, la expresión beatífica y serena de quien ha alcanzado el paraíso o, quizás, fuera la expresión bobalicona de quien vive en el limbo.


sábado, 10 de agosto de 2013

Insecto relajado



                           Después de tanto zumbido, de tanto ir de acá para allá ¿qué mejor lugar para relajarse que la delicada hoja de una planta?