Velico Tarnovo y Arbanasi son dos poblaciones búlgaras. La primera ciudad es muy antigua; su origen se debe a los tracios y ha tenido gran importancia en la historia de Bulgaria ya que fue su capital durante el Imperio Búlgaro, una época en la que este país alcanzó su máximo esplendor como muestran los muros de la Fortaleza de Tsarevets.
La ciudad antigua de Velico Tarnovo se alza sobre la ladera de un montículo donde las casas descienden hasta el río Yantra.
Y mirando aquel, en un paisaje de frondosa vegetación, se levanta el Monumento Asenid construido en 1985 para conmemorar la fundación del reino búlgaro en 1185. El conjunto escultórico representa a cuatro reyes de este país: Asen, Petur, Ivan Asen y Kaloyan.
Cerca de Velico Tarnovo se encuentra el pequeño pueblo de Arbanasi que fue habitado por ricos comerciantes de origen otomano que vivieron en esta zona desde el siglo XVI. Se puede visitar alguna casa en la que se nos muestran el interior y la forma de vivir de aquellas gentes como la Casa Konstantsalieva
Se observa el parecido de las viviendas con una pequeña fortaleza con un muro que las rodea y construidas con anchas paredes. Tienen dos plantas, la baja edificada en piedra y la de arriba, donde residía la familia, en madera.
En Arbanasi se halla la iglesia de la Natividad, una verdadera joya de los siglos XVI y XVII de gran valor artístico y considerada como la más importante obra pictórica religiosa de Bulgaría y una de las más bellas de todos los Balcanes.