Alice Walker publicó en 1982 la que sería su novela más conocida: El color púrpura. Por ella recibió el premio Pulitzer en 1983 y el American Book Award.
Esta escritora estadounidense ha publicado novelas, relatos, ensayos y libros de poemas. Sus escritos se centran en la lucha de los afroamericanos, en especial las mujeres, contra la sociedad racista, sexista y violenta.
El color púrpura es una novela epistolar en la que trata la historia de una mujer negra durante la primera mitad del siglo XX, Celie, que lucha contra las actitudes fomentadas desde el patriarcado negro.
El director norteamericano Steven Spielberg llevó esta novela al cine en 1985. El tema de El color púrpura es la liberación de una esclavitud: el dueño y señor es el marido, la esclava la mujer. La liberación de la protagonista se va dando paso durante toda la película, gracias a su afán por leer, sobre todo las cartas de su hermana que vive en África, que le lleva a otro lugares y le hace sentirse con un poder, el del conocimiento, que el marido maltratador no tiene.
Además de la violencia y el sexismo presentes en el patriarcado negro en El color púrpura también se trata el racismo presente en la cultura blanca, del que es víctima otra mujer negra: Sofía.
A Sofía, mujer independiente y segura de sí misma, su rebeldía la conducirá a la destrucción física y moral. La agresión al blanco no sólo le acarreará tortura y cárcel, sino que acabará siendo criada de su agresor y separada de su familia.
En la película hay omisiones de partes de la novela, inevitables debido a la limitación de tiempo requerida por el film, que lo empobrecen como agente transmisor de la identidad cultural afroamericana.
Tanto la novela como la película retratan la vida de las mujeres afroamericanas en el sur segregacionista de los Estados Unidos y representan de forma similar a los personajes femeninos. Ambas producciones artísticas revelan los sufrimientos que la mujer negra ha sobrellevado en una sociedad fundamentalmente patriarcal, no sólo dentro de la comunidad negra sino también en la sociedad anglo- americana. Y también, novela y película, muestran el coraje de estas mujeres para afrontar dificultades y para defenderse de la agresión.
Pero hay una gran diferencia entre novela y película y es la relacionada con la representación masculina. Mientras que Alice Walker representa al hombre negro como un individuo complejo, muy cruel a veces pero capaz de transformarse, Steven Spielberg no sólo le quita esa complejidad sino que, al acentuar su brutalidad, contribuye a estimular los estereotipos negativos del hombre afroamericano.
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